Un año que llega al final
es un buena oportunidad para
reflexionar sobre lo vivido.
Aprender, asimilar, purificar, nuestra Alma.
Siempre sirve para equilibrar nuestra mente
entre lo que proyectamos
y lo que pudimos concretar
Mucho habrá quedado en el camino,
mucho será lo que quede por hacer
y con las fuerza renovada
que esto último nos brinda
tenemos que encarar, enfrentar, comenzar
el nuevo año que llega.
Con más fuerza, con mas luz
con más optimismo, con más alegría
volver a idear
volver a proyectar
retomar lo bueno que hayamos
dejado inconcluso
y que nos haga verdaderamente felices
Comencemos el 2011 con mucha Luz
con mucha ENERGIA POSITIVA
que de seguro todo va a resultar mejor,
si le ponemos una cuotita de amor y buena vibra!
ANA DE SANTIS