Por supuesto creo que a esta altura se entiende que no tengo ninguna creencia religiosa terrenal. Creo en la gente, cuando ésta vale la pena.
Ya no malgasto más Energía Positiva en quienes no valen un céntimo. Ya no les asisto para subir la Escalera , pero tampoco los trabo. Simplemente los dejo pasar.
¿Y quienes “no valen la pena”?
Aquellos que te falsean ayuda; que te brindan una mano débil de la que no podes tomarte porque te desmoronás; aquella gente de Alma Oscura que quiere ennegrecer la tuya tratando de destruir lo que hacés o de impedir que hagas; los que tienen ganas de seguir enterrados en el lodo porque en realidad tienen miedo, pánico, de salir de esa oscuridad y ver la luz, el día, el Sol, LA VIDA !
Son parte de la gente Oscura que tenemos que evitar y si no nos queda mas remedio que estar con ellos cerca nuestro y ya agotaste, y te agotaste como yo de ayudarlos a salir de su negrura sin resultados positivos, apartáte para que su oscuridad no te haga sombra.
No vivas a la sombra de alguien o oscurecido por la negrura de Alma de alguien.
Mi Energía Positiva es importante para mí y lo tiene que ser también para vos!. Es ultravaliosa para mí. Y la voy a reubicar y redirigir hacia lo que yo creo valioso en mi vida y en quienes creo que valen la pena.
Creo en mi familia que es mi sustento principal. Creo en los amigos. Creo en el Universo que me originó, en la reencarnación, en María Magdalena y Jesús como seres humanos divinos, especiales, llenos de amor pero no en la Iglesia , (en ninguna Iglesia, que condena a algunos y enaltece a otros sobre todo al dinero); no creo en la sonrisa falsa y adulante, ni en la palmadita en la espalda; tampoco creo en quienes se rien de todo todo el día (tal vez sean los mas tristes e infelices); no creo en quienes son incapaces de ver sus debilidades y defectos ( los que se creen "perfectos"); no creo en los que se acercan cuando necesitan algo y se alejan cuando vos los necesitas.
No creo en la desidia, no la practico ni la amparo.
Creo en la energía propia, en mi mente, en mi Alma, en el amor, la bondad, la alegría, en mantener una actitud proactiva y no pasiva en la vida.
No llevo mi vida a la rastra como una mochila cargada de plomo. Así la carga muchísima gente. Y esa mochila la lleva a su casa, al trabajo, la desparrama por todos lados y trata de que otros tambien la carguen igual.
Hay vidas muy pesadas. Lo sé con total conocimiento de causa. Pero logré levantar esa mochila, transformar el plomo en plumas y usarla para vivir con la mente en positivo, la cabeza en alto y sin negruras de Alma que me opaquen.
Hoy reubiqué la energía que me volvió al Cuerpo y que durante muchos años invertí en mi trabajo tratando de mejorarlo, (totalmente en vano), en mí, en mis proyectos, en mi familia y en la gente que vale la pena acompañar, ayudar y seguir en el ascenso de la Escalera de la Vida.
QUE NADIE TE HAGA SOMBRA Y NO SEAS LA SOMBRA DE
NO ARRASTRES LA VIDA COMO
ANA DE SANTIS
